domingo, 31 de mayo de 2015

Ayer como hoy. Proyecto, transformación social y trabajo liberador

En el 2006 planteábamos cuatro premisas para sostener cualquier discusión sobre Proyecto:

a. que no podían existir horarios de clase “mosaico”;
b. que la planificación debía adaptarse al Proyecto;
c. que Proyecto, por supuesto, debía continuar; y
d. que el proyecto debía construirse en la comunidad y con la participación académica de todas las Unidades Curriculares.

Y hoy, 2015, sostengo punto por punto lo que entonces sostenía:

“Cuando yo entré a la UBV comencé a “dar clases”, luego me di cuenta –y no fui yo solo- que a ninguna parte íbamos a llegar por esa trilla. De ahí la necesidad de socavar las bases de la educación liberal burguesa sostenida como todo el sistema capitalista sobre la noción administrativa y política del control del tiempo. Si controlo el tiempo, tengo el poder. Si el control del tiempo se difumina en la comunidad y todos participan en su construcción, entonces el poder queda en manos de todos. El empoderamiento pasa pues, por la construcción colectiva del tiempo. El tiempo que hasta hace poco sólo conocíamos no nos pertenecía, le pertenecíamos a él, desafiando como siempre la enseñanza bíblica de que el sábado se hizo para el hombre y no el hombre para el sábado. Repito estas ideas sólo para reafirmar que la planificación es un modelo a escala de lo que puede suceder en el país si las esclusas que contienen el definitivo poder popular son abiertas, esto es, si en definitiva nuestra población asume de veras, completamente, su destino. En otras palabras, si construye colectivamente sus propios tiempo y espacio.”

Hoy como ayer, sostengo que Lo administrativo que ha construido y gerencia el conocido tiempo de oficina es capitalista (¿Habrá que decir que la noción de “trabajo” que conocemos es la que ha elaborado por y para nosotros el Mercado, con su manejo bien controlado del week-end, las vacaciones y los días feriados?) Necesitamos construir nuevas experiencias temporales, nuevos ritmos de creación, nuevos criterios y, sobre todo, otro patrón de Orden.”

Finalmente: en el “dilema entre lo excedentario y lo autosuficiente, o para decirlo en los términos actuales, entre el desarrollismo capitalista y el desarrollo endógeno, entre el capital privado y financiero y las cooperativas, entre el egoísmo y la competencia propios del mercado y la solidaridad, entre el Estado burgués y liberal y el Estado que promueve la creación la participación y el protagonismo de los Consejos Comunales, se funda el drama de nuestra contemporaneidad, ese es el debate que nos toca a nosotros los venezolanos, de la mano, de la voz, de la pasión de un Presidente que nos convoca a construir un país libre, autosuficiente y soberano.”

Traigo a colación estos elementos porque el proyecto REPOSITORIO DE PROYECTOS DEL PFG COMUNICACIÓN SOCIAL PARA EL FORTALECIMIENTO DE LA UNIDAD BÁSICA INTEGRADORA PROYECTO EN UBV Y MISIÓN SUCRE, los trae de vuelta, con experiencia acumulada y un marco nacional que le confiere sentido, oportunidad y contexto.

Dejo para su lectura, el texto publicado en su momento:

Hacia un debate sobre la planificación del tiempo en la Comunicación Social de la UBV


viernes, 29 de mayo de 2015

Desde el 2006, pensando en lo mismo...

Tengo pensado comenzar el rescate de algunos textos donde abordo las ideas que, hoy, han ido consolidándose en el proyecto Repositorio de Proyectos de Comunicación Social para la UBV y Misión Sucre. Y comienzo con este texto TSU y la Economía popular, publicado en un blog el 03 de abril de 2006.

En este texto abordo el problema estructural del desempleo y el panorama incierto que se le ofrece a nuestros estudiantes y egresados: "Nuestras universidades y tecnológicos son fábricas de desempleo, quien lo duda, y tal como van las cosas en aquel lado de la frontera del “mercado de trabajo” las cosas van de mal en peor. La tendencia mundial y Venezuela no escapa a ello es a la tecnologización e informatización de todos los procesos de producción de bienes y servicios, lo que trae consigo que el número de empleos diste años luz de aquel bucólico sistema industrial que empleaba a muchos para producir mucho. Ahora, la producción y la ganancia, van de la mano del despido y la flexibilización."

Y afirmo, como lo sigo diciendo hoy, lo que le toca a nuestros egresados, en revolución: "los técnicos no pueden ser otra cosa que ciudadanos (hablo de nuestros estudiantes y futuros TSU) articulados en sus comunidades a las redes de la organización popular, esto es, peritos en el manejo de equipos y en la producción de medios, pero en contextos socioculturales, comunitarios específicos. No se trata de que sean ellos los que sepan y manejen los medios, sino los que enseñen, ayuden, asesoren, acompañen a las señoras y señores del Comité de Salud, por ejemplo, o de las Mesas Técnicas, en el proceso de dar cuenta, informar, decir, cómo es que va la cosa y cómo es que puede ir mejor. Lo otro será reproducir en escala local la acción representativa y mediadora de los medios de comunicación que conocemos y de los que decimos estar hartos. Abrir el micrófono al pueblo no es lo mismo que darle el micrófono y la cónsola y la máquina de edición. (Se me dirá que precisamente es eso lo que va a suceder después de los “módulos”, pero he aquí que asoma un problema que tampoco hemos querido debatir y que trata precisamente de epistemología: el conocimiento existe y por lo tanto se enseña, o el conocimiento no existe y por lo tanto se construye. Si existe, entonces es único y sólo conocido por unos pocos especialistas; si no existe, entonces lo podemos aprender entre todos. Si existe, se puede aprender aisladamente, en salones, cubículos y laboratorios; si no, entonces tiene que ser construido en colectivo y en contextos socioculturales específicos.)"

Y hacía énfasis: "Necesitamos que nuestros estudiantes se pongan con el micrófono y la cámara del lado del pueblo, esto es, no al frente ni detrás, sino ahí con ellos, en tanto que ciudadanos y vecinos articulados a la organización popular. No se puede hablar entonces –sin ser un contrasentido- de prácticas laborales en el mercado de trabajo. Por eso es que insisto: nuestro pensum de estudios está de espaldas a la Economía Popular, a las cooperativas y microempresas, y en el caso del PFG hasta de los Productores Independientes!!!"

Los invito pies, a leer el artículo, desde ahí, en su sitio de publicación original.

lunes, 25 de mayo de 2015

Taller de Proyectos Socio-Productivos en Cabimas

Ayer 23 de mayo en la ciudad de Cabimas, en un salón amablemente facilitado por el Sindicato de Obreros Petroleros, el Núcleo Simón Rodríguez adscrito al Centro de Estudios de Comunicación Social de la UBV-Zulia, llevó a cabo el Primer Taller sobre Proyectos Socio-Productivos a un grupo de docentes y estudiantes de Comunicación Social de Misión Sucre.

El propósito es crear conciencia en torno a a necesidad de diseñar proyectos en Comunicación Social Popular y Comunitaria y Tecnologías de la Información y la Comunicación donde se conjuguen saberes, transformación social y trabajo liberador.